2024-02-18 02:01:45
Si Alimerka Oviedo avait bien fait une des choses très différentes dans lesquelles ils ont commis des erreurs, ils auraient probablement remporté la victoire hier sur le terrain d’Orense et n’auraient pas perdu dans une prolongation au cours de laquelle ils ont été bloqués en attaque. Les responsabilités de l’équipe asturienne ont été nombreuses : elle a été mauvaise sur le rebond défensif, concédant douze attaques à son rival ; Il a encore une fois gaspillé des lancers francs comme s’ils étaient donnés, avec une série de 12 en 21 tentatives, symptomatique de la façon dont les erreurs se sont multipliées dans les moments chauds du match ; Il a perdu dix-sept ballons et, en outre, n’a pas pu arrêter la principale menace de son rival, Justin Turner, un énorme talent qui a terminé avec 31 points. Et, avec tout ça, Elisias était proche de frapper au dernier moment une balle qui leur aurait donné la victoire avec un duel à égalité à 78 points.
L’équipe d’Oviedo est entrée dans le match quelque peu confuse et cela a permis à son rival de marquer 13 points en cinq minutes, un score auquel seul Mikel Sanz a répondu, qui a marqué les sept premiers pour l’équipe qui portait hier le jaune (13-7). À partir de là, l’OCB a fait un pas en avant, surtout en défense, et seuls ses problèmes dans le jeu intérieur, un énorme fardeau pour le moment, ont permis à Ourense de prendre l’avantage dans le deuxième quart-temps (19-18).
Llegaron minutos muy buenos del OCB, con un Duscak que tiró del carro como si él fuera el veterano del equipo, anotando, dirigiendo y dando un punto de intensidad que el equipo necesita como el comer. Los problemas en el rebote y algunos errores infantiles impidieron que esos buenos minutos se tradujeran en una ventaja amplia que, con el acierto en el triple que ayer tuvo el equipo de Javi Rodríguez, parecía lo normal. Tampoco la suerte les acompaña y Turner metió un triple en el último segundo desde el fondo de la pista (41-42).
En minuto y medio de tercer cuarto, entre Duscak y Horton elevaron la renta a ocho puntos (41-49), pero tras el tiempo muerto de Félix Alonso, técnico rival, el OCB se esfumó del partido y recibió un 22-7 que dio la vuelta al choque por completo (63-58). En esos momentos, los problemas para proteger el rebote defensivo fueron enormes y encima Turner campó a sus anchas y se fue sintiendo cada vez más cómodo.
La sensación en el último cuarto es que el partido se le iba al OCB, pero fue capaz de agarrarse a él, de no desesperarse ante sus fallos y, un poco a trompicones, un tiro libre de Sanz (el otro lo erró) puso al equipo de Javi Rodríguez a solo dos puntos (76-74) cuando aún quedaba 1 minuto y 34 segundos por jugarse. Martí vio la quinta falta personal, pero de nuevo Sanz estuvo listo para coger un rebote tras un mal lanzamiento triple de Josep y empatar el partido a 76 a un minuto del final. Un par de buenas defensas permitieron a Josep meter una canasta que ponía por delante a Oviedo (76-78) a 11 segundos del final. Solo necesitó cinco Turner para empatar. La tuvieron Horton de tres para ganar y Elisias en el palmeo posterior.
En la prórroga, el Oviedo se bloqueó en ataque y también sufrió con algunas decisiones arbitrales, como la quinta falta personal que señalaron a Duscak, que fue absolutamente escandalosa. Pero la derrota llegó porque necesitó tres minutos y medio para que Horton anotara la primera canasta (83-80). A partir de ahí, todo fue a la desesperada, con un Horton errático en el lanzamiento de tres y con un OCB que agota semana a semana su margen con el descenso. Son cuatro derrotas seguidas y tiene mucho que corregir el OCB en este parón antes de regresar a Pumarín el domingo 3 de marzo nada menos que ante el Lleida.
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